El secretario de Tierras y Viviendas Municipal, Juan Manuel Batallánez salió el cruce de algunas críticas que recibió en referencia a la construcción de viviendas a través de la Fundación Techo en el barrio Jorge Newbery donde se asentarán familias que viven en un asentamiento en avenida Drago al costado de las vías del Belgrano Cargas. Entrevistado por EL TIEMPO, se mostró muy molesto por los comentarios surgidos en medios de comunicación radiales específicamente.
Juan Manuel Batallánez
-¿Qué fue lo que le molestó de los comentarios acerca de la construcción de las viviendas en Newbery?
-En principio debo decir que estamos peleando contra la campaña del miedo que han pergeñado algunos agoreros del mal acerca de la relocalización de las familias de avenida Drago y las vías.
-La crítica apunta, entre otras cosas, como los materiales utilizados para la construcción de las casas; y que el lugar es inundable. ¿No lo es?
-Cualquiera compra un espacio y opina. Parece como ese sketch de televisión, hablemos sin saber. Puede servir para atacar al gobierno municipal, pero en medio hay una organización como Techo, que no la inventamos nosotros y no tiene ninguna connotación de tipo partidario; y en definitiva son las personas que plantearon cuáles son los tipos de viviendas de emergencia, las características del proyecto y la participación de los voluntarios; y obviamente lo que provocó que no hayamos podido terminar con el proceso para que las familias se puedan mudar, es las malas condiciones climáticas que estamos viviendo (por el jueves último). Durante poco más de veinte días no salió el sol. Y en cuanto a la zona, es una mentira que es inundable. El lote sí es verdad que se hizo un charco grande. Falta hacer bien el zanjeo de los desagües pluviales del contorno de la manzana. Y por supuesto que al llover con tanta intensidad, como no estaba hecha todavía la zanja, se hizo un charco en el lote. Cuando deja de llover el agua baja; pero en ningún momento las casas se inundaron. Insisto, había un gran charco de agua. Pero una vez que terminemos, y esperamos que ahora sí nos acompañe el clima, de perfilar las calles y los trabajos necesarios, el lugar quedará perfecto. Pero no hay un curso de agua que inunda el terreno.
-¿No hay ninguna familia viviendo allí?
-Hay dos familias viviendo, porque su situación anterior era muy precaria. Acá se está hablando despectivamente de las casitas de cartón, y lo cierto es que de las veinte familias que vivirán allí, salvo cuatro, el resto vive en casas de chapa con pisos de tierra y sin acceso a los servicios, colgados del cable de electricidad. Y aquí tienen todos los servicios y energía eléctrica, con calefón eléctrico que les proveerá agua caliente; e incluso luego pueden ampliar las viviendas y tener más espacio para vivir. Por eso da bronca cuando salen a criticar desconociendo todo esto.
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