Guerrico, al igual que muchas otras localidades del partido de Pergamino, debe su existencia a la expansión de las líneas ferroviarias en Argentina.
Fue en septiembre de 1883 cuando la punta del riel del ramal Pergamino-San Nicolás del Ferrocarril del Oeste llegó a estas tierras, marcando el nacimiento de un pueblo que hoy cuenta con 775 habitantes. Ubicada en el límite con el partido de San Nicolás, Guerrico reúne en un solo nombre a la estación y al pueblo, diferenciándose del clásico diseño de la mayoría de los pueblos por su particular trazado urbano, caracterizado por manzanas irregulares. Estos trazados caprichosos, a menudo con formas triangulares, responden a la disposición de los tendidos ferroviarios y a los límites entre distintas propiedades.
Las tierras donde se estableció la estación Guerrico fueron donadas a la empresa ferroviaria por Pedro V. Acevedo. Originalmente llamada "Manantiales", la estación adoptó definitivamente el nombre de Guerrico por decreto del 30 de marzo de 1890, en honor a Manuel José de Guerrico, quien tenía una destacada actuación como vicepresidente del directorio del Ferrocarril del Sur y quien luego ocupó la presidencia en 1893. Guerrico también era dueño de la estancia “El Oratorio” en el partido de Ramallo, donde ejerció como primer juez de paz.
Desde su fundación, Guerrico atrajo a numerosos trabajadores que eligieron estas tierras para vivir. Las estancias de Martin, Kehoe, y los hermanos Paz se convirtieron en centros de trabajo para inmigrantes provenientes de diversas regiones de España, Italia, Francia, Siria, Irlanda, Bélgica, Alemania y Yugoslavia. Sin embargo, la inmigración más significativa provino de la República de San Marino. Este hecho convirtió a Guerrico en la localidad argentina que más inmigrantes sanmarinenses recibió, un fenómeno que dejó una marca indeleble en la identidad cultural del pueblo.
El legado de estos inmigrantes se preserva en el «Museo del Inmigrante», que funciona en la Casa de la Cultura, ubicada en la antigua estación de trenes. Este museo exhibe objetos, documentos y recuerdos que narran la historia de aquellos primeros pobladores que encontraron en Guerrico un nuevo hogar.
En noviembre de 1946, un grupo de vecinos preocupados por la falta de un templo en Guerrico decidió adquirir un terreno para comenzar las obras de construcción. En mayo de 1947, se propuso a la Inmaculada Concepción como patrona de la comunidad, y la piedra fundamental fue colocada el 25 de mayo de ese año. La construcción de la capilla, con ladrillos fabricados en la estancia “El Retiro” de los hermanos Paz, comenzó en septiembre de 1948, y finalmente, el 8 de diciembre de 1953, se inauguró el templo.
La inauguración de la capilla fue un momento de orgullo para la comunidad, que había trabajado arduamente para dotar al pueblo de un lugar donde expresar su fe. La Fiesta Patronal de la Inmaculada Concepción, que se celebra el 8 de diciembre, sigue siendo un evento central en la vida religiosa y social de Guerrico.
Un Centro de Actividades Sociales y Educativas
A lo largo de los años, Guerrico ha desarrollado una rica vida comunitaria en torno a sus instituciones educativas y sociales. La escuela N° 20 “María Magdalena Güemes”, que funciona desde 1902, ha sido durante más de un siglo el centro neurálgico de la formación y difusión cultural en la localidad. Además, desde 2011, los jóvenes pueden cursar sus estudios secundarios en el Anexo de la Escuela Media N° 1 de Acevedo, ubicado en Guerrico.
El Club Atlético Progresista de Guerrico, fundado el 20 de septiembre de 1909, es otra de las instituciones clave de la localidad. Además de promover el deporte, el club ha sido un espacio para la realización de actividades sociales y comunitarias. Sus colores han brillado en numerosas ocasiones en las canchas del partido, consagrándose campeón de la Liga Deportiva de Pergamino en diversas oportunidades.
Otra institución destacada es el Centro de Jubilados y Pensionados de Guerrico, creado el 11 de noviembre de 1982. Este centro cuenta con un edificio propio inaugurado el 12 de abril de 1995 y se ha convertido en un lugar de encuentro para los adultos mayores de la localidad.
Tradiciones y celebraciones populares
El pueblo no solo se distingue por su historia y su comunidad, sino también por sus tradiciones y celebraciones. La Fiesta de la Empanada y los Carnavales son dos eventos que se han convertido en marcas registradas de la localidad. Estas festividades atraen a vecinos y visitantes, fortaleciendo el sentido de pertenencia y la identidad cultural de Guerrico.
Una comunidad que ha sabido preservar su esencia a lo largo de los años. Aunque en la actualidad su población es significativamente menor que en su apogeo en 1944, cuando contaba con aproximadamente 2.950 habitantes, el pueblo mantiene un estilo de vida tranquilo y cómodo. Los servicios esenciales están cubiertos por la Cooperativa Eléctrica, Telefónica, Vivienda y Otros Servicios Públicos Limitada de Guerrico, y la comunidad cuenta con un Centro de Atención Primaria (CAP) donde un médico atiende cuatro veces por semana.
Guerrico es un ejemplo de cómo un pequeño pueblo puede mantener viva su historia y sus tradiciones, mientras sigue siendo un lugar acogedor para sus habitantes y un destino atractivo para quienes deseen conocer un rincón de la Argentina que sigue ligado a sus raíces ferroviarias y a la rica herencia de sus inmigrantes.
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