La reciente decisión del intendente Javier Martínez de iniciar cambios en su gabinete marca un punto de inflexión en la administración del Municipio de Pergamino. Frente a la inminente necesidad de renovación y ante las dificultades que ha afrontado en su gestión, estos movimientos son una respuesta a las complejidades de gobernar y a las relaciones políticas que se han ido desgastando.
El primer paso en este proceso es la reestructuración de la Secretaría de Hacienda y Finanzas, que estuvo bajo la dirección de Andrea Lamelas. Este cambio sigue al altercado entre Martínez y Sergio Federico Tressens, quien optó por alinearse con la lista del radicalismo. La decisión de Martínez de desvincularse de Tressens y buscar un perfil más afín a su gestión es un indicativo de sus intenciones por fortalecer su espacio político, conocido como "el Martinismo". Lamelas, que regreso tras su paso por Modernización, será ahora la encargada de la Tesorería Municipal, en un intento por estabilizar las finanzas locales.
Andrés Dal Ochio, conocido por su larga trayectoria en la municipalidad, asumirá la dirección de las finanzas, aportando su experiencia en momentos críticos.
Por otro lado, la Secretaría de Servicios Públicos, liderada hasta ahora por Pablo García —un aliado cercano a Martínez desde 2015—, también enfrentará un cambio significativo con la llegada de Juan Pablo Verdún, lo que marca una nueva etapa en este rubro fundamental del ejecutivo municipal.
Estos cambios se producen en un contexto donde las dinámicas políticas han evolucionado y, tal como mencionó como profesor de un curso de lideres en la UNNOBA el ex intendente Héctor María “Cachi” Gutiérrez, “ el primer período suelen estar llenos de promesas y alianzas, mientras que en el segundo se pide ayuda a los amigos y en periodos posteriores la búsqueda de colaboradores se asemeja a una consulta en la guía telefónica”. Esta metáfora resuena con la realidad que enfrenta Martínez: la dificultad de construir un equipo que responda a sus expectativas.
Sin embargo, no solo se detiene en los cambios anunciados. Martínez tiene en mente modificar otros espacios de su gabinete, como las Secretarías de Seguridad y Desarrollo Social.
A pesar de la importancia de estos cambios, el intendente se encuentra con resistencias, especialmente en el caso de Paolo Bonano, un referente que, aunque no pertenece a su partido, ha demostrado eficacia en su labor.
La gestión de seguridad, liderada por Doddi, ha comenzado a enfrentarse a desafíos que podrían exigir una revisión de su continuidad. Además, se anticipan cambios en otras direcciones municipales, reflejando un deseo más amplio de renovación y adaptación.
Es fundamental que cada intendente tenga la oportunidad de conformar su equipo ideal. Los años de gestión dejan huellas y dificultan la construcción de nuevas alianzas. En Pergamino, las secretarías de Desarrollo Urbano y Tierras son actualmente ocupadas por radicales, lo que subraya el equilibrio político que Martínez debe mantener.
Es alentador saber que se prevén cambios también en el área de salud, lo que podría reflejar un esfuerzo por atender las necesidades del pueblo.
El Dr. Karin Dib, un hombre clave en la administración,desde la Secretaria de gobierno parece tener un acomodo estratégico en el círculo más cercano del intendente.
A medida que se materialicen estos cambios, el éxito de la gestión de Martínez dependerá de su capacidad para acercarse a la comunidad. La necesidad de reconectar con los ciudadanos de Pergamino es urgente, especialmente para aquellos que lo ven como distante o arrogante. Si logra estrechar lazos y demostrar un compromiso genuino con las inquietudes del pueblo, podría transformar la percepción que se tiene de su figura política.
El desafío es enorme, y aunque Javier Martínez no tiene la posibilidad de reelección según la legislación actual, cuenta con la oportunidad de dejar una huella positiva en su ciudad antes de su salida en 2027. La política pergaminense necesita líderes que entiendan y actúen en función de las demandas de su comunidad, y el tiempo dirá si Martínez está a la altura de este reto.